Fundació Roure y los famosos

13/06/2017

En la Fundació Roure no pasamos desapercibidos, y es que distintas celebridades y famosos han visitado nuestra Botiga Solidaria en busca de su particular tesoro. Lee a continuación la entrevista con Silvia, la responsable del escaparatismo y almacén que nos explicará… ¡todo lo que pasa en la Botiga Solidaria!

1. ¿Qué tipo de personas vienen a la Botiga Solidària?
Mira, viene todo tipo de gente. La mayoría es gente del barrio, y en este barrio hay de todo. Se ha convertido en un barrio multicultural, gente que trabaja en el barrio, turistas, inmigrantes, estudiantes… Es una tienda muy atractiva para cualquier persona.

2. ¿Quién dirías que es el personaje más peculiar que ha entrado en la tienda?
Una vez vino una escultura viviente de las Ramblas, vestida tal cual, toda de blanco, que había bajado de su pedestal y venía a comprar cosas a la Botiga Solidària. Se quedó una camisa, unas figuritas de cristal… y se pasó un buen rato mirando todo lo que teníamos. Porque en la Botiga ya pasa esto, esto, que te puedes tirar horas y horas rebuscando.
3. ¿Cuál es la cosa más rara que os han pedido?
Aquí la gente no pide, la gente viene a mirar. Sí que ha habido piezas muy extrañas, exprimidores viejos, unas palomitas pequeñas de plástico que se venden muchísimo. Y ¿quién lo compra? Gente de todo tipo, gente joven, madres, artistas…
Una vez vino un poeta/periodista colombiano que se quería quedar todo lo que tenía que ver con el café: juegos de café, cafeteras antiguas… y estaba muy preocupado por cómo se lo llevaría a su país. Había ganado recientemente un premio, e incluso nos comentó que estaba implicado en política. Fue muy simpático y amable, pero se olvidó de pagar un juego de café. Y como nos dejó su tarjeta, le enviamos un correo para reclamárselo, y sí, sí, ¡volvió y lo pagó! Además, aprovechó para quedarse un montón de camisas, camisetas… ¡no te lo puedes llegar a imaginar! ¡Era un comprador compulsivo!
Otra vez, vino un chico muy bien plantado que se compró un conjunto: una camisa, un chaleco y una americana, que le quedaban como un guante. En el momento de pagar, ¡se dio cuenta de que no llevaba efectivo! Resulta que este chico era mago, y para pagar el conjunto, ¡salió a la plaza a hacer unos cuantos trucos de magia a la gente que paseaba por allí! Y con las propinas que ganó pudo pagar el conjunto.

4. ¿Qué otros personajes “famosos/conocidos” han pasado por la Botiga Solidaria?
A mí, uno de los personajes que más me llamó la atención fue Quico Pi de la Serra. ¡Vino a arreglarse el dobladillo de un pantalón! Le vi y me quedé muy sorprendida. Le pregunté por su nombre para entregarle el encargo, y me respondió “Pi de la Serra”, y yo contesté ¿“Quico Pi de la Serra!!!?”, y me dijo que sí. De la emoción no le pude responder, y subí corriendo a buscar su pantalón.
Después nos preguntó por la sección de libros infantiles, para venir a pasar una tarde con su nieta escogiendo libros.
Han pasado otros famosos, pero viéndolos fuera de contexto cuesta más reconocerlos, alguna vez sí que hemos visto a Joel Joan, Julio Manrique…

5. ¿Qué es lo que acostumbran a comprar, o qué vienen buscando?
Cada uno compra su historia, hay quienes compran libros, otros compran vajilla, cosas pintorescas… algún tipo de cristalería, alguna pintura, cosas que les parecen bonitas. Y, por supuesto, ¡ropa!

6. Si pudieras hacer la carta a los reyes magos, ¿qué famoso te gustaría que visitara la Botiga?
No lo sé… que viniera Miquel Barceló, por el tema de la pintura, ¡a ver si nos regala una obra suya! Que viniera el de Zara para que viera cómo se reutiliza su ropa… Ada Colau para enseñarle la ropita de bebé… Mario Vargas Llosa…

7. ¿Qué producto de la Botiga Solidaria recomendarías a cada uno de los siguientes personajes?
● Pilar Rahola: un gorro, o un tocado, ¡algo muy exuberante!
● Carles Puigdemont: le ofrecería un CD de salsa, ¡para que se animara un poco!
● Lluís Llach: ¡a Lluís Llach solo me lo podría quedar mirando, no le podría atender!
● Judit Mascó: ¡una pieza de ropa para que la pudiera lucir, un foulard bien bonito!